En unos años tendremos a un montón de mujeres preguntándose por qué las más cercanas no dijeron que estaba viviendo violencia en el pasado (que es hoy presente), se preguntarán por qué sus amigas callaron a pesar de que el sujeto la maltrataba a todas luces, por qué las mujeres cercanas callaron a pesar de lo evidente que resultaba que estaba viviendo violencia, habrá un reproche doloroso en la corazona y muchas relaciones rotas, claro, no es culpa de ellas, nunca es de ellas, es de los tipos, eso no hay que olvidarlo. ¿Pero por qué callaron? Porque en el 2020 estaba de moda decir «no opines, respeta el proceso de la otra», «no digas que eso es violencia, esa es la ‘agencia’ de ella», «no tienes derecho a decirle nada porque no estás siendo respetuosa», «no expreses tus ideas porque eso es ‘imponer'». La cosa está en las formas, claro, yo estoy convencida de que el eje es ser amorosas, ¿pero callar? eso nunca.