Hace unos meses se comenzó a hablar de una tal librería «feminista» en la cmdx. ¿Por qué se cree en esos proyectos sin verificar? Hace algunos meses también en esa misma librería se hicieron y se hacen mesas con hombres transfemeninos que explican qué es feminismo y ser mujeres: machos. Y este fin de presenta una de las máximas representantes de proxenetas ahí mismo: Georgina Orellano. ¿Podemos dejar de acudir a lugares a todas luces que usan el feminismo como marketing para posicionar trata de mujeres y hombres vestidos de mujer? Urge.
