Si pudiera elegir

Si pudiera elegir un recuerdo, sería julio de 1994, mi madre, joven e ingenua, baila Selena y canta a Daniela Romo, yo juego en una avalancha con mi hermanito y luego peino a mis muñecas de brillos. Si pudiera elegir un recuerdo sería 2003, lo suficiente para ser una niña, pero no tan grande como para darme cuenta de qué va el mundo adulto, las tardes son para hablar con mi mejor amiga S, en la parada de la combi. Si pudiera elegir un recuerdo sería 2013, el año en que me hice lesbiana sin marcha atrás, los días nuevos, el sabor de la lesbiandad. Si pudiera elegir un recuerdo sería 2021, este tiempo para estar viva, con la máquina andando a toda velocidad, como si cada escena perteneciera a Dark y cada movimiento rompiera y fragmentara cientos de caminos que no voy a tomar, caminos que vivirán mis otras yo, en otras universas, y que un día, en muchos años añoraré. O quizá no, probablemente no.

Deja una respuesta