Ya lo decía Karina Vergara Sánchez en días pasados: Primero filtraron datos de la víctima, ayer se filtraron las fotos de los acusados para darle herramientas a los mismos para defenderse, ya que es una falta al debido proceso andar difundiendo rostros y nombres, por eso cuando miramos notas, les cubren la cara, pero esto ya lo sabíamos, por mucho que hervíamos en rabia, no podíamos acusarles con el rostro porque era darle herramientas para salir libres, aún así lo hicieron y se difundió en la rabia. Es como dice Karina, una ingenuidad, pero pasó.
Es cierto que la manifestación fue buena a nivel de impacto mediático, así como de organización de colectivas, eso no se pone en duda; es lo mínimo que se tenía que hacer y se hizo, con todo y las críticas que ya han elaborado puntualmente muchas compañeras, como la presencia de hombres y la misma diamantina como herramienta del feminismo más posmoderno que borra a las mujeres y lo sabemos.
Lo que ha venido a continuación es la misma receta. Las ONGs, organizaciones que han vendido históricamente el movimiento de las mujeres a costa de los financiamientos con los que viven, ya salieron a hablar por nosotras, a decir que trabajarán con los gobiernos, no es nuevo, es lo común, se adjudican una falsa representación para seguir vendiéndonos. Lo que pasa aquí es que encubrirán violadores mientras instalan alguna política ridícula con la legitimación de estas ongs, como los silbatos, ¿se acuerdan? algo así saldrá, con una gran campaña de comunicación muy chic y con elementos de la protesta, ¿qué tal mujeres fotografiadas con sus rapados laterales y sus ropas negras?, ya saben que el marketing es marketing, además ofrecerán un par de trabajos a activistas, las invitarán a museos, universidades, ponencias, posgrados, ellas que aspiran trabajar algún día ahí, desde los famosos derechos humanos y la perspectiva de género, se andarán con cuidado porque corre en peligro su carrera, o sea, si se portan bien, les irá bien; si se portan mal, no podrán tener más invitaciones como las que tienen.
Nosotras somos las que deberíamos andar con cuidado, lo que importa es que se haga justicia y que no haya más mujeres violentadas, y no lo vamos a hacer con ayuda de las generistas ni gobiernos, aunque la protesta se tenga que hacer, tendremos que averiguar cómo crear y defendernos aquí hombro con hombro porque solo nos tenemos a nosotras.
