Cientos y cientos de mujeres desaparecidas y asesinadas por hombres. Todos los días. El mensaje que envían es terrible, somos destinatarias y al mismo tiempo, ninguna tiene inmunidad en este sistema donde somos como objetos o cosas, es decir, somos el mensaje y al mismo tiempo las destinatarias. ¿Cómo no salir afectada en esta vida? ¿Cuántas secuelas hay en nosotras aún difíciles de pronunciar? Y aunque parezca poco lo que hacemos, sanar nuestras relaciones entre nosotras es de verdad, mucho.
