Olvidamos el patriarcado con las mujeres de nuestra familia

Me he dado cuenta de algo al escuchar a mujeres hablar de las mujeres de su familia. La versión es que ellas están ahí “porque quieren”, que “pudieron no elegir eso, pero les gusta la mala vida”, que “todo mundo las apoyó, pero no quisieron salir adelante”. Me llama la atención esta versión porque es la versión usualmente de la madre y nosotras la repetimos. Mamá le dio a todas sus hijas las mismas oportunidades, pero alguna de ellas no quiso y se casó. Mamá le dio todas las oportunidades a sus hijas, pero alguna de ellas no quiso y se embarazó. Mamá le dio todas las oportunidades a sus hijas, pero algunas de ellas no quiso y se fue a la prostitución. Mamá se explica que eso que les pasó es porque no “quiso” (la hija), porque ella (la madre) trabajó largas jornadas partiéndose literalmente el lomo para que fuera otra realidad la de ella (su hija), pero a ésta se le “antojó” no “querer” una mejor vida. La madre se quiere culpar de no poder controlar todo, así que ella asumirá con culpa que controló todo, las condiciones sociales y económicas a través de su explotación en el sistema patriarcal (un salario insignificante y trabajar sin salario), pero la hija no respondió bien, así que es de ella la culpa (de la hija). Sucede que compartimos culpas entre mujeres, nos es fácil porque para eso fuimos adiestradas, siempre es nuestra culpa, son nuestras decisiones y los hombres no tienen nada qué ver. Las mujeres nos autoengañamos para no asumir con dolor que no tenemos el control de nuestras vidas en un sistema que está hecho de nuestra aniquilación, que si se embarazó no fue porque ella quisiera sino porque hay un sistema que legitima violaciones y le llama “amor”, “deseo”, “consentimiento”, “naturaleza” a cualquier violación. Que si se fue a la prostitución no es porque ella lo eligiera sino porque está esclavizada de las emociones a los pies, despojada por un sistema que la mutiló para vaciarla y que la tortura físicamente para que no pueda escapar. Que si se casó es porque le dijeron que era lo mejor que podía esperar ella que es una mujer, un objeto, un accesorio, una cosa. Escucha cómo hablas de las mujeres que conociste de chamaquita, tus primas, tus hermanas, tu madre, las abuelas, tus sobrinas, escucha lo que estás diciendo…en la explicación que das, ¿ahí ya no hay sistemas de opresión? ¿para explicar su vida se acabó el patriarcado y todas deciden libremente? ¿ya no hay misoginia, racismo ni capitalismo en esas versiones? ¿Están ahí “porque quisieron”? ¿Cuánto nos engañamos para evitar ver que lo que nos aniquila no es nuestra decisión? Esto no quiere decir que no podamos hacer algo, sé que la rebelión feminista es posible porque de resistencias están hechas nuestras cuerpas e historias, pero también sé que no podremos continuar si asumimos que estamos aquí porque “quisimos”.

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