Yo no puedo negarles ni borrarles nada, ni excluirles ni imponerles algo, solo soy una mujer nacida en Abya Yala, sin poder económico, con una vida laboral de incertidumbres, con 32 años a cuestas, que habla, opina, se mueve, siente, expresa, con esta cuerpa sexuada de mujer, con esta vida que me pueden arrebatar a cualquier precio, colgando en una cuerda floja que pende de cualquier movimiento mal dado. ¿Quieres decir que no estás de acuerdo conmigo en una idea? Pues podrías, si quieres, decirlo así: «no estoy de acuerdo», «no concuerdo», «no comparto», pero eso de «me borras», «me niegas mi identidad», «me excluyes», «me prohibes» está mal dimensionado, pues no puedo hacer eso, estás dirigiendo un mensaje tramposo porque no tengo el poder de excluir (¿me ves hombre o rica o gobernante?) ni tampoco el poder de borrarte nada, tú andas sin mí, ¿no te ves bajo el yugo de quién estás? no es mío ni es por mis ideas, no tengo el poderío de las cadenas que te atan, el poderío que me adjudicas es una mala fantasía del opresor.
